Todas las ciudades tienen sus locales de culto. Lugares inmortales cuyas paredes han presenciado las idas y venidas de abuelos, hijos y nietos. Pequeños reductos de Historia y de historias. Uno de esos lugares míticos y mágicos es el Café Comercial de Madrid. Cuando, hace unos años, anunció su cierre tras más de un siglo sirviendo cafés se nos encogió el corazón: perdíamos un trocito de nuestra memoria. Por suerte aquél adiós fue sólo un “hasta pronto”. Hoy el Café Comercial ha vuelto, más lozano, castizo y zalamero que nunca. Disfrutón empedernido, apúntese la visita que esto no es cosa chica: la reencarnación del Comercial llega con una propuesta gastro fetén y versatil que, palabra de eat&love, engatusará a sus exigentes papilas gustativas. ¿Vamos?

 

 

 

Los últimos años del Café Comercial no fueron precisamente gloriosos. Con todo, su reapertura era todo un reto -reinventar un símbolo siempre lo es-. Tenemos que confesar y confesamos que, durante un tiempo, creímos que el mítico local se había convertido en otro reducto de posturetas más en el que la buena cocina brillaría por su ausencia. Pero ya ves, querido eat&lover, todos metemos la pata y nosotros también: nos equivocamos. Los chicos del grupo El Escondite -nuevos propietarios- han hecho un trabajo fetén con el Café Comercial, tanto en el local -reformado por Madrid in Love- como en la propuesta gastro, conservando la esencia castiza del Comercial, pero modernizada. Pero la cosa no acaba aquí: en su nueva vida el Comercial también recupera su vena ‘cultureta’ con una agenda cultural llena de espectáculos que lo devuelve a los tiempos en los que fue lugar de culto de los artistas madrileños.

El nuevo Café Comercial se divide en varias áreas. Por un lado, la planta baja de bar y cafetería (siempre abarrotada, todo hay que decirlo: ¡prepárate para dar codazos!) en la que se respeta el interiorismo original: barra, suelos, lámparas, mesas de mármol y espejos de paredes se mantienen intactos. Por otro, un nuevo comedor en la planta de arriba decorado con los retratos de los escritores que frecuentaban el Comercial. Aquí -en los baños- es donde está el ya archifamoso fotomatón vintage en el que medio Madrid ya se ha retratado poniendo los caretos de rigor.

 

 

¿Y qué se come en el Café Comercial? Pues muchas cosas, y todas muy ricas, oiga. La cafetería se mantiene con su carta de desayunos y meriendas y sus míticos chocolates con churros (¡viva!) y se evolucionan los apartados de bar y restaurante. La planta baja es perfecta para un picoteo informalón encaramado a su mítica barra (si es que puedes mandar a un sicario a que te consiga un sitio, ejem) o sentado en el área de bar / cafetería. En carta vas a encontrar embutidos, gildas y algunas raciones finas y castizas (bravas con alioli de Madroño -¡y qué bravas, madre de Dios!-, croquetas hechas con leche del Guadarrama, mejillones tigre… y todos los clásicos viejunos que nos encantan). Pero además, ahora tienes un restaurante como Dios manda con una carta de proximidad y castiza fetén diseñada con mucho tino por el cocinero Pepe Roch (Macareno, Barbara Ann).

¿Quieres saber más, querido disfrutón? No te agobies hijo, que te lo contamos: en la carta del Café Comercial vas a encontrar, como te decíamos, una cocina 100% castiza elaborada -cuando se puede- con productos de cercanía (carne de La Finca, leche del Guadarrama, productos de la sierra … ). Podrás elegir entre platos de picoteo sencillos como su ensaladilla rusa o sus albondiguillas de vaca vieja y otros más elaborados como su canelón de rabo de toro con bechamel y portobello; sus taquitos de merluza de pincho a la romana o su sapito de rape con patatas panadera hecho al Josper. ¿Quieres saber más? Te lo contamos, como siempre, con “platos y señales”.

 

 

– CAFÉ COMERCIAL, PLATO A PLATO –

Patatas bravas con alioli de madroño

Vas a decir que somos unos exageraos. Y seguramente te vamos a poner las expectativas altísimas y la vamos a liar. Pero nos mojamos: estas son las mejores bravas que hemos comido nunca en Madrid (así, tal cual). Crujientitas por fuera, suaves y harinosas por dentro y acompañadas de dos salsas fetén que no vas a encontrar por ahí muy fácilmente: una de tomate casera densa y sabrosa, con un buen punch picante, y un alioli cremoso y potente con un curioso toque de madroño. Y ya paramos, que nos rugen las tripas.

 

Mejillones tigre

Un plato que nos chifla preparado con mejillones gallegos rellenos de una bechamel potente repleta de sabrosos trocitos de mejillón que se aprecian perfectamente y fritos posteriormente con panko sin que queden nada aceitosos. Muy ricos también, sí señor.

Croquetas de jamón de leche de Guadarrama

Empezamos emocionados y seguimos estándolo con este nuevo tanto para el ranking castizo que se anota el Café Comercial con sus croquetas. Preparadas con leche de Guadarrama, poco aceitosas, crujientes, cremosas al máximo y con saborazo a jamón rico de bellota. Croquetero empedernido, prepárese para gozar ….

 

 

Ensaladilla rusa

Un platillo clásico que nos encanta y que en el café Comercial destaca por su suavidad y la calidad de sus ingredientes, como el atún y el toque de sabor de las huevas de salmón.

 

Canelón de rabo de toro en su jugo con bechamel y portobello

Si te gustan los canelones debes estar sufriendo con la visión de esta foto: créenos, ¡te entendemos! Un plato contundente, generoso (sí, es uno, ¡pero qué uno!) cocinado al estilo de la abuela: jugosón, con un buen y meloso rabo de toro guisadito, un toque de setas y una bechamel suave de aires muy caseros. Sencillo, resultón y, en general, muy logrado.

 

Chipirones a la plancha, sémola con su tinta y suave alioli

Un curioso plato en el que encontramos de nuevo un buen alioli, unos estupendos chipirones llenos de sabor y una base de sémola cocinada con tinta, al estilo de un arroz negro. Muy bien.

 

Torrija caramelizada sobre arroz con leche y helado de violeta

El postre en un local que presume de castizo como el Café Comercial tenía que estar de 10 y sí, lo está. Esta torrija caramelizada con (oh God) base de arroz con leche y helado de violeta es un absoluto despiporre goloso. ¡Un 10 para el Comercial!

Y con esto y un bizcocho, nos despedimos hasta la siguiente recomendación,

Con cariño,

Susana & Fabio

 

---