Sí, lo admitimos: somos unos ‘pendones verbeneros’, -que dirían nuestras abuelas-. Pero, oigan, somos de carne y hueso y nuestros cuerpos tienen un límite. Cuando la alarma salta, nos ponemos en huelga y nos apuntamos a uno de los mejores planes del mundo: quedarse en casa, arrebujaditos en nuestro sofá (con el gato en modo ‘calefacción ronrroneante’ en la barriga). Y comer. Comer y que, como no podía ser de otra forma, nos lo den todo hecho, que estamos muy cansados e ir al súper es peor que una clase intensiva de Zumba. Gracias a los cielos, los canguros de Deliveroo nos traen la comida de nuestros restaurantes favoritos en Madrid en menos de lo que tarda en cargar el próximo episodio de Narcos. Mientras llega el pedido, te damos algunas ideas (y sus correspondientes excusas) para montártelo en casa. Ahí va la primera: los 8 euritos que te regalamos, de parte de Deliveroo, en tu primer pedido, con el código EXCUSASANDLOVE). Let’s go!

 

Excusa 1. Porque no hay nada mejor para combatir el frío que un “caldito reconstituyente” (y si lo tomas tirado/a en el sofá, mejor que mejor): ya lo decía tu abuela, y no le faltaba razón: no hay nada mejor para tu cuerpo serrano que un buen “caldito reconstituyente”, de esos ardientes, de soplar la cuchara antes de llevártela a la boca. La sopa por antonomasia -la que ellas nos preparaban- es la que sale del caldo del cocido, con sus míticos fideos, como la de Lhardy (que te sirven, por cierto, junto al cocido: ¡fetén!). Si tienes el día picante, lánzate a por un ramen, como los de Ninja Ramen o a por alguna de las opciones thai de Tuk Tuk, como la Tom Ka Gai, con pollo, leche de coco, champiñones y chalota, lima y citronela.

Excusa 2. Porque estamos “mu flojos” y salir a cenar es más duro que correr la maratón: que sí, que salir a cenar agota. Que si elegir el sitio, que si poner de acuerdo a tu prole de amigos, que si hacer la reserva con días de antelación -antes de que las ‘hordas’ madrileñas’ de glotones te pisen la mesa- … sólo de escribirlo, nos entra la flojera. Por eso, de cuando en cuando, no hay mejor plan que el No-Plan o, lo que es lo mismo: hacerte fuerte en casa, y no moverte de allí ni a punta de pistola. Para pasar el retiro (y recuperarte del tute que llevas encima) nosotros te recomendamos que te apuntes a pedir a los canguros de Deliveroo un buen plato de la abuela, como el pollo en pepitoria de La Carmencita, el pollo de corral a las finas hierbas de La Rotisserie o, si tienes mucha gusa, un cocido completo de Lhardy -uno de los más famosos de Madrid-.

Excusa 3. Porque necesitas un día para hacer una maratón de tu serie favorita (antes que tus amigos llenen el grupo de Whatsapp de la cuchipandi de spoilers): Peli, manta y serie. Uno de los No-Planes clásicos que más nos gustan. Piénsalo: cada día que sales de ‘pendoneo’ es un día que pierdes para ver esa serie de la que todos hablan. Cada hora que pasa sin que la veas, el riesgo de que alguien te casque algún spoiler aumenta exponencialmente, y eso, tú lo sabes, sería una tragedia. Así que, porqué no, esta noche quédate en casa, calentando el sofá frente a la TV. ¿El complemento perfecto? Una deliciosa pizza, como las de Fortino Pizza o Ovên, por ejemplo. O quizás una burger, como las de Goiko Grill o Mad Café. ¿Quién da más?

Y, con esto, y un bizcocho, nos despedimos por hoy. No sin antes recordarte que puedes hacer tu primer pedido en Deliveroo con 8€ de descuento utilizando el código EXCUSASANDLOVE. ¡Qué aproveche!

Con cariño,

Susana & Fabio

*Nota de Susana y Fabio: este post ha sido patrocinado por Deliveroo, pero no te preocupes: como siempre, lo hemos redactado con sinceridad y de corazón, eligiendo con todo nuestro mimo, criterio y cariño cada uno de los sitios que has visto en él ?

 

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