Podríamos decir que Limone es una encantadora tavernetta italiana en el barrio de Salamanca, la primera de Madrid especializada en originales bocconcini -bocaditos- italianos y sería cierto, pero es mucho más que eso. Porque Limone es un homenaje a los veranos felices de la infancia, al calor del Mediterráneo y al cariño de las nonnas. Y, además, Limone es el primer restaurante que diseñamos íntegramente desde nuestro eat&love studio (Lolo Polos Artesanos, Rita la Cantaora…). Somos los orgullosos papás de un precioso proyecto y te lo vamos contar con “platos y señales”. Andiamo?
Limone es la tavernetta ligure (de La Liguria italiana) de la familia Assandria. Su historia comienza años atrás, en la mesa abarrotada (de delicias varias, nietos, tías y papás) de una villa de veraneo en Bordighera. Al frente, la matriarca, la Nonna Sandra, adorada y respetada a partes iguales por su alborotada prole de nietos. Ellos no lo sabían entonces, pero un día, un puñado de ellos abriría una tavernetta para homenajear a esa mujer extraordinaria -que decía tener sangre real- y a esas mesas llenas de delicias della Nonna y risas: se llamaría Limone (como los limoneros del jardín de la villa) y en ella, como en los días de la infancia, siempre brillaría el sol.
Francesca y Marco Assandria (chef de Limone), junto a Asdrubal, llamaron hace unos meses a la puerta de nuestro eat&love studio para contarnos esta maravillosa historia y compartir con nosotros su sueño de abrir un restaurante. Junto a nuestro Ángel Espinosa, The Food Manager (consultoría de negocio gastro) y Marta Banús (interiorismo) hemos dado vida a este bonito proyecto, diseñando un concepto gastronómico –bocconcini (bocaditos o tapas) italianos de inspiración ligur y focaccias- para disfrutar entre risas y amigos (puedes cotillear la carta aquí) y un espacio que emula a esos días de verano en La Liguria italiana y, cómo no, a la Nonna (muchos de los bocconcini de la carta se inspiran en sus recetas, actualizadas por el chef, su nieto, Marco).
Limone es un local pequeñito, pero coqueto, decorado en tonos blancos, con toques de amarillo limón y una preciosa pared con un limonero pintado a mano por nuestro Ángel Espinosa. Las mesas son todas altas, con taburetes (también en la barra -decorada con los utensilios de cocina de la Nonna-) que apoyan el concepto de tapeo del local. Fuera, una gran terraza con estufas para que no se te meta el frío en el cuerpo (que aquí, ya sabes, es verano siempre y no lo queremos ni ver). ¿Y la marca? Para Limone hemos diseñado una imagen moderna (el logotipo está pintado con acuarela y tratado digitalmente, con un equilibrio muy cuidado entre lo masculino y lo femenino; lo sofisticado y lo artesano; lo moderno y lo clásico.
La carta de Limone (provisional) es una carta de tapeo ‘a la italiana’ (con influencia ligur) en la que el protagonismo se lo llevan los bocconcini -bocaditos / tapas italianas- y las focaccias -típicas de La Liguria-. Se divide en cuatro secciones: Antipasti, Le Focaccie, Ricette della Nonna -inspiradas en los platos de la Nonna Sandra- y Dolci. En sus propuestas encontrarás una Italia poco conocida, informal y apetitosa, como la de sus arancini (las ‘croquetas’ italianas, rellenas de risotto, sus ravioloni allo scoglio (rellenos de frutos del mar troceados) o sus Scaloppine di pollo al limone con patate casalinghe (de pollo en salsa de limón con patatas de la casa). De postre, una golosa focaccia de Nutella o unos ravioli de tiramisú rellenos de helado de vainilla y, de propina, un Limone Sour (el cóctel de la casa, con amaretto, clara de huevo, lima, licor de mandarina y cardamomo) o alguno de sus cócteles clásicos o italianos (también tienen selección de vinos, cerveza y café italiano de Lavazza).
Y, con esto, y un bizcocho, nos despedimos por hoy: cin, cin!
Somos Susana y Fabio, foodies empedernidos, viajeros y diseñadores de experiencias gastro (eat & love studio). Te recomendamos los mejores locales de Madrid. ¿Te apuntas a comer y amar con nosotros?
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