Hoy somos marineros; hoy vamos a arriar nuestro estómago en el puerto de Madrid (que sí, que no estamos locos, ¿o sí?); hoy queremos navegar por los 7 mares (foodies) y reír por los cuatro costados; hoy vamos a comer y amar a El Loco Antonelli, una taberna de puerto que nació como un pequeño puesto en La Chispería de Chamberí (Mercado de Chamberí) y que hoy se ha transformado en un precioso restaurante a tiro de ancla de Ponzano. ¿Su propuesta? Cocina de puerto nacional e internacional con guiños (siempre) castizos y el toque de genialidad del capitán de este barco: su chef Sergio Mange Reyes. ¿Embarcamos? ¡Aar!

 

 

Dicen que el mundo es de los soñadores (o de los locos, que viene a ser lo mismo): uno de esos locos es Sergio Mange Reyes, el joven chef de El Loco Antonelli que, junto a las chicas de 3dePulpo, se lanzó hace ya unos añitos a montar esta pequeña taberna de puerto a la que tanto cariño tenemos en eat&love (desde eat&love studio nos encargamos del diseño integral de la marca y de asesorar el concepto gastro al que después Sergio dio vida -¡y qué vida!-). La taberna de El Loco Antonelli nació en un pequeño puesto de la Chispería, en el Mercado de Chamberí. Allí Sergio se metió a todo el que se atrevió a encaramarse a la barra de su puesto en el bolsillo con su salero y una cocina de puerto imprevisible y deliciosa de la que te hemos hablado hasta el aburrimiento en eat&love (sí, cuando algo nos gusta podemos ser un poco cansinos). Hoy ese pequeño puesto es un restaurante en toda regla, bonitísimo, marinero (cómo no) y a tres pasos de Ponzano en una zona que promete ser un ‘spot foodie’ y disfrutón imprescindible.

 

 

¿Y cuál es la propuesta de El Loco Antonelli? Como te contábamos, el Loco es la taberna del puerto de Madrid. La historia tiene chicha, así que antes de soltar amarras y lanzarnos a comer te vamos a pedir un segundo para contártela (merece la pena). Juan Bautista Antonelli fue el ingeniero italiano al servicio de Felipe II a cargo del faraónico proyecto de transformar Madrid en un puerto de mar, conectando nuestro Manzanares con el gran Atlántico (¡no es broma, no!: las obras se iniciaron y todavía quedan restos). Esta historia, recuperada por el súper director de Arte de eat&love studio, Ángel Espinosa, fue el pretexto perfecto para desarrollar un concepto gastro que parte de un imaginario puerto de Madrid para volar a otros puertos icónicos nacionales (Pasajes, Canarias…) e internacionales (Singapur, Nueva Orleans, Hawaii…).

Así, en la carta de El Loco Antonelli vas a encontrar platos nacionales del puerto de Madrid como los mejillones con salsa brava; del de Pasajes, como la merluza al Orio (de esas que se deshacen en la boca… ¡memorable!) o de Canarias, como el pulpo ‘a la guanche’. Y ojo a la sección internacional, porque no tiene desperdicio: de Singapur llega el famoso chilli crab y de Hawaii el poke (plato que el Loco tuvo antes que nadie, por cierto. Si eres adicto aquí tienes una lista del mejor poke de Madrid). Y si esto te parece poco, Sergio siempre está en plena ebullición, listo para sorprenderte con sugerencias fuera de carta preparadas siempre con lo mejor del mercado. Mención aparte merecen sus vinos y cócteles y es que El Loco ha fichado a Rubén Lorenzo (ex jefe de sala en Lamian) que a parte ser más majo que las pesetas hace unas recomendaciones vinícolas fetén y prepara unos cócteles (personalizados solo para ti) memorables. Las cervezas, ojo, también se salen (tienes opciones artesanas con agua de mar y otras ideas interesantes). Y ahora, como siempre, te contamos nuestra experiencia “con platos y señales”.

– EL LOCO ANTONELLI, PLATO A PLATO –

 

Ostra Gillardeau con “sangre”

No hay chef del mar que se resista a una buena ostra y Sergio no es una excepción. En El Loco vas a poder catar unas ostras francesas Gillardeau fetén con un potente punch de sabor a mar. Puedes gozarlas tal cual o “con sangre”. Que no te asuste este naming un poco escatológico: la “sangre” solo es una inocente reducción de flor de hibisco ; )

 

Merluza Orio

En la nueva etapa de El Loco Antonelli no podía faltar el plato favorito de los fans de su puesto en La Chispería: un estupendo lomo de merluza de pincho (del puerto de Pasajes, ojito), cocinado justo en su punto (las lascas se desprenden como mantequilla), y acompañado en una receta “al Orio” muy particular de verduras, merengue de ajo y guindilla.

 

Empanada frita de de chipirón, rape y ‘txangurro’

Los fans de las masas vais a enamoraros de esta mini delicia: una empanadilla frita rellena de una riquísima mezcla de txangurro y rape y acompañada de habas frescas y una espuma de chipirones en su tinta. Contundente y muy marina, aunque no le habríamos hecho ascos a un trocito un poco más grande ; )

 

Dumplings de cochinillo con curry rojo de cangrejo

Continuamos el banquete con más empanadillas, pero esta vez en su versión oriental al vapor: el dumpling que nos quita el sueño. Los de El Loco van rellenos de cochinillo, pero tranquilo que el toque marino no falta: se bañan en un vicioso curry rojo de cangrejo de mar. Además, llevan hierbas aromáticas y setas enoki para un punto asiático extra. ¡De 10!

 

Tortilla fea de verduras

No te dejes engañar por las apariencias que esta tortilla fea está buena y rebuena. Es una jugosa tortilla abuela-style recién preparada con huevos camperos poco cuajados, verduritas de temporada y setas. El toque loco (que no se le ocurriría a la abuela) y que nos flipa se lo da su genial aderezo: una rica salsa de cangrejo y chiles ahumados.

 

Picanha de buey

Ningún buen marinero de taberna hace ascos a un buen pedazo de carne para reponer fuerzas y los de El Loco no vais a ser menos. Porque en su carta hay algún platazo de carne como esta espectacular picanha de buey marcada al hierro súper jugosa y en su punto (a Fabio le trae loco). Si tienes el lado goloso a tope, también puedes acompañarlo con un poco de tuétano asado.

 

Postre

¿Has dejado hueco para el postre? Bien hecho, bucanero, porque los de El Loco Antonelli son de los que merecen la pena. Caseritos y originales, como este que combina fresas glaseadas con vermut, crema de yogur y chocolate blanco y crujiente de cereales. ¡Mmm!

 

Cóctel

Y si eres de los que en la sobremesa plantal al cafelito por un cóctel buenorro (no te culpamos) estás de suerte. Rubén Lorenzo, coctelero de El Loco, es de esos que te miran a los ojos y te preparan un cóctel a tu “medida disfrutona”. A nosotros nos debió oler la vena jaranera (se nos ve el plumero) porque nos preparó una especie de pisco sour a base de vino tinto que entraba como el zumo. ¡Top! ; )

Y con esto, y un bizcocho… ¡nos despedimos hasta la semana que viene! No sin antes recordarte nuestro lema:

come y ama, lo demás ya vendrá ; )

Con cariño,

Susana & Fabio

 

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